MAR
en el borde...
al filo de la tierra...
Yo
permanezco
en aquel lugar que se desploma
sobre su base mar adentro...
y recuerdo,
recuerdo de pronto
el aliento azucarado
de un niño mirando nubes
que Dios observa atento
levantando sus pliegues escamados de dragón,
le miró, a él, no al niño,
a este Dios que invento
mientras tiento letras,
le escucho quejarse:
“La historia tiene la culpa sobre mí y sobre mis palabras,
sin odiar. Ellos están lejos, demasiado lejos de mi para que yo apoye una mano
una vez o ligeramente.”
Mientras
yo
permanezco
en aquel lugar que se desploma
sobre su base mar adentro...
y recuerdo,
recuerdo de pronto
el aliento formol
de un aborto a remolque
de su cordón umbilical,
flotando ahí,
en el mar,
en el borde...
al filo de la tierra...
De “Poemas para olvidar: sustratos de una muda
conciencia”
Enrique Soberanes

1 comentarios:
Rifado...
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