Flor

Nacimos con el dolor arrancado a espasmos, las brasas del pasto seco agrietan nuestro pecho de barro y se derraman los efluvios de nuestras congojas cotidianas. Asi miramos el tardecer perdido tras las nubes de la desesperanza amortiguada en un buen vaso de licor, mota, valium, coca, opio, soledad....Drogas solo para acompañar el ocio de nuestra mente cansada de realidad..Amoratados brazos.... la heroina de mi vida se disuelve en una cuchara calentada con un miserable encendedor marca Bic.

Asi pen(s)aba inquieto Arturo esperando a Flor, quíen llevaba ya diez minutos de retraso.Mientras buscas con las manos un cigarro en tu chamarra luida, haces lo mismo con tus ojos, intentando internarlos lo mas profundo en la espesa noche sin luna, entre las equinas de donde supones debe llegar.

-Ahi viene la pinche tira-

Piensas entonces en el pequeño cigarro de mota que cargas en la mochila-ni lo de una puta bacha- Y aun asi te la pueden armar de pedo. Corres entonces a ocultarte entre los arbustos del parque, guardas la respiracion y comienzas a acariciarte la entrepierna. Bajas la cremallera de tu pantalón y metes la mano concava para acariciarte mejor.

La tira pasa alumbrando las esquinas y escuchas un poco de las risas de los polis. Piensas en Flor. En su mano humedecida por tu saliva. Te metes los dedos a la boca. Gimes dentro de ti. Arqueas un poco la cadera y es entonces cuando temblando de frio llevas tu mano entre tus nalgas para masajearte levemente, suave, suave...Nadie te ha visto aun y sigues esperando a Flor. El ritmo de ambas manos crece, merodeas tu ano con el dedo gordo. Entras, entre ti. Aflojas las piernas y tiemblas...